ANTONIO GABRIEL GRAÑA RAMOS IN MEMORIAM
Como expresión de agradecimiento y profundo pesar por su reciente fallecimiento, traemos hoy aquí la memoria de Antonio Gabriel Graña Ramos, quien, por invitación de Ricardo Martínez Barros, vino a colaborar altruistamente en las III Jornadas de Voluntariado organizadas en agosto de 2015 en el Monasterio de Samos. En la foto superior le vemos sonriente ocupando el tercer lugar por la derecha, entre Elías Puga y Ricardo Martínez. En la imagen aparecen todos los voluntarios que acudieron a las III Jornadas.
Antonio, por aquellas fechas gozaba de la salud recuperada después de superar una difícil dolencia oncológica. Haciendo un paréntesis en su actividad de farmacéutico especializado en Análisis Clínicos y Microbiología, profesión que ejercía en Hospital Xeral de Vigo; acudía a Samos para colaborar en la sencilla tarea de pintar el antiguo dormitorio de los colegiales. Tuvimos el gusto de compartir con él trabajo y alegría y saber de su entusiasmo y sano humor. El pasado día 13 de enero Ricardo Martínez nos comunicaba su óbito. Desde esta página queremos transmitirle a su familia y amigos nuestro pesar y sincero afecto.
En el refectorio del monasterio.
Antonio hace entrega al P. Prior, José Luis Vélez, de su libro "Nuestras Vidas", que por aquel entonces estaba recientemente editado. La escritura era una de sus vocaciones. Concretamente en este libro dedica un capítulo a nuestro compañero y común amigo, Ricardo Martínez Barros. Otro título que le conocemos es "Galileo Galilei en el ángulo oscuro".
Momento de descanso en una terraza próxima al monasterio, después de una intensa jornada de trabajo.
Descanse en Paz Antonio Graña Ramos.
3 comentarios:
Antonio nos ha dejado. Le conocí hace casi 40 años. El regresaba de esquiar en Los Alpes suizos y a mí me lo presentaron en una cancha de tenis del Aero Club de Vigo. Pero Antonio no era el "niño pijo" que por su condición social y profesional parecía ofrecer. Antonio era un amigo excepcional. Comunicativo, juesguista, organizador de eventos, hiperactivo. Y le llegó su enfermedad contra la que luchó varios años.
Ultimamente se refugiaba, por las tardes, en el Club Financiero de Vigo. Aquí ya era el único lugar en el que se le podía ver durante su larga lucha contra la enfermedad. A Antonio le encantaba la tertulia, el comentario, el diálogo, la comunicación...Por eso encontraba en los Clubes de Vigo el lugar ideal para revivir momentos de literatura, investigacion...como si añorase aquellos cafés a los que acudían los buenos escritores de nuestra literatura casi contemporánea. Pienso que sería una asíduo del CAFE GIJON de Madrid.
Antonio se nos ha ido. Y con él mi gran amigo el VINCULEIRO, término con el que nos saludábamos. Me dedicó un capítulo de su libro NUESTRA VIDAS, y también se lo dedicó a Samos, del que era un enamorado, y al que llevé ya hace algunos años.
Descanse en paz mi querido, nuestro querido amigo ANTONIO GRAÑA RAMOS-SABUGO
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Agradezco el afecto expresado en estas líneas hacia mi hermano Antonio.
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