De el quedará memoria en nuestros recuerdos y presencia pictórica en ala oeste del claustro procesional desde que Enrique Navarro lo inmortalizase vestido de púrpura en el séquito que presencia la escena de la apoteosis de la Regla de San Benito.
Igualmente recogemos de la prensa la noticia destacada de la reunión en Samos de una cuarentena de abades, abadesas y priores de los monasterios benedictinos de la península Ibérica. En ella analizaron con preocupación el progresivo envejecimiento de las comunidades monásticas, entre otros asuntos.
(Imagen tomada del diario El Progreso)
1 comentario:
Solo espero que de estas reuniones salgan soluciones al deterioro y envejecimiento que se esta produciendo dentro de las comunidades.
Hay que, de alguna manera, generar ilusión para atraer juventud que vaya tomando el relevo a estas generaciones tan mayores.
Se debería desde los Monasterios poner en valor las vivencias y abrir a nuevas ideas, quizás un poco mas aperturistas y atrayentes para las nuevas generaciones.
Buena iniciativa.
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